Una mamoplastia y una mastopexia son cirugías estéticas para hacer modificaciones en el pecho. La diferencia entre estos procedimientos de cirugía de pecho son los resultados. Las dos son procesos para conseguir el pecho que siempre has deseado, o que tuviste y perdiste con el paso de los años, al pasar por un embarazo, o por pérdidas de peso considerable. Ambos tratamientos también coinciden en que su finalidad es la reconstrucción del pecho, ya sea porque necesita reconstruirse o reafirmar los senos que están caídos por el paso de los años, o por un remodelado propio de un aumento o reducción de pecho.
Por un lado, la mamoplastia busca una reducción o aumento del tamaño del pecho, mientras que la mastopexia busca recobrar la firmeza del pecho, devolviendo la elasticidad a los senos para eliminar las mamas caídas y flácidas. En una mastopexia no se intenta aumentar o reducir el tamaño del pecho, sino de elevarlo y moldearlo para devolverle un aspecto más joven. En el caso en que la paciente quiera reducir el pecho, también podría realizarse una mastopexia para recuperar la elasticidad del pecho.
Mamoplastia
Tanto de reducción como de aumento, una mamoplastia es una cirugía para remodelar la forma de los senos. Será de aumento si el objetivo de la operación es el de aumentar de volumen mamario con prótesis o implantes de silicona. Eliminando el tejido graso, mamario y la piel sobrante, se consigue una mamoplastia de reducción, pues busca modificar el tamaño de las mamas de la paciente.
Ventajas de mamoplastia
La mamoplastia tiene como fin aumentar el volumen de los senos o reducirlos, por lo que existen dos tipos: mamoplastia de aumento y mamoplastia de reducción, ya sea porque la paciente quiere unos pechos más voluminosos o como tratamiento complementario a una mastopexia. Pero una mamoplastia no es únicamente un procedimiento quirúrgico para aumentar los senos. También sirve para corregir la asimetría de los senos o recuperar el volumen del pecho tras un embarazo.
La tecnología y nuevas técnicas han permitido que estos tratamientos sean capa vez menos invasivos, de tal forma que no solo hay menos riesgos durante la cirugía, sino que además mejoran la vida del paciente. Por eso una mamoplastia ya no deja cicatrices visibles en la paciente, y no será necesario cambiar las prótesis en mucho tiempo.
Mastopexia
La mastopexia, conocida también como lifting de senos, consigue de una manera natural reafirmar el pecho y elevar la zona del contorno femenino. Este procedimiento quirúrgico permite solucionar los senos caídos y mejorar por completo tanto la forma como el volumen del pecho. En determinadas ocasiones, también será necesario eliminar el exceso de piel y llevar a cabo una reducción de la areola.
Durante una mastopexia también puede realizarse una reducción, aumento o reconstrucción completa de los pechos.
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Ventajas de una mastopexia
El objetivo de la mastopexia o elevación de mamas, como su nombre indica, es elevar el tejido mamario, de forma que el cirujano pueda remodelar el pecho caído y reubicar las mamas, para que la paciente recupere la elasticidad
La principal ventaja de esta cirugía estética será la de recuperar el aspecto original de tu zona mamaria, por lo que dejarás de tener el pecho caído.
Aunque el tiempo de recuperación requiere como mínimo un mes, la paciente podrá ver cómo desaparecen sus pechos caídos y obtiene unos senos más juveniles.
Si además se realiza una mamoplastia de aumento, logrará unos pechos naturales, con más volumen y firmes.
Mastopexia y aumento de pecho
Una vez explicadas las diferencias entre mastopexia y una mamoplastia, debes conocer también que estos procedimientos pueden llevarse a cabo en una misma operación. El aumento de senos creará volumen a través de la prótesis, pero aparecerá una flacidez excesiva del seno, lo que hará que los senos se vean muy poco naturales; Asimismo, los implantes mamarios levantan la mama pero no aportan el volumen necesario para conseguir la forma adecuada a las necesidades de la paciente.
Corrigiendo la flacidez del pecho, una operación de mastopexia y mamoplastia busca elevar el pecho caído y la implantación de prótesis. Mientras que la mastopexia reafirma el pecho y vuelve a elevarlo, una mamoplastia aumenta su volumen, logrando así un pecho más joven y firme.