La disfunción sexual afecta a mujeres y hombres, pero en hombres es un problema muy evidente ya que se reconoce fácilmente por la disfunción eréctil. Por otro lado, en mujeres no se ha dado la importancia que tiene ya que se ha asociado a un proceso normal del envejecimiento y, a diferencia de la disfunción sexual masculina, también afecta a la libido de las mujeres con lo que disminuye el deseo sexual. Los síntomas son evidentes e impiden el desarrollo del acto sexual placentero y natural: sequedad, dolor, menor estimulación durante el coito, incontinencia urinaria, etc.
Esta disfunción sexual femenina es un problema que afecta al 40% de las mujeres y puede tener múltiples causas. En Clínicas Doctor Life recomendamos, antes de empezar ningún tratamiento, intentar reducir el estrés ocasionado por el estilo de vida actual e intentar mantener relaciones con la pareja de forma normal y natural, hablando de los gustos sexuales y posibles fuentes de placer con confianza para conseguir la mayor estimulación posible. También se recomienda el uso de estimuladores y lubricantes, pero hay que destacar que esta es una medida provisional mientras se corrige el problema de fondo que está causando dicha disfunción.
Una vez descartados problemas de estrés o reacciones a medicamentos, en Clínicas Doctor Life consideramos que hay dos principales que causan la disfunción sexual femenina: riego sanguíneo insuficiente y/o desequilibrio hormonal. Ambas se pueden dar al mismo tiempo y el desequilibrio también puede ser la causa del riego insuficiente por lo que se recomienda una exploración y analítica de sangre para determinar cual de estos problemas pueden ser y corregirlo de la manera oportuna.
En nuestra clínica somos pioneros en tratamientos hormonales. La deficiencia de estrogénica aparece con otros síntomas asociados a la menopausia como son los sofocos, ansiedad, cambios de humor bruscos, etc. En el caso de la disfunción sexual femenina, suele darse un déficit estrogénico y de andrógenos (testosterona) y se recomienda la administración de ambas hormonas. Los pellets hormonales ya contienen una mezcla de ambas y se cambian cada 4 meses aproximadamente, aunque depende de las características del paciente.
Si por el contrario el problema es de riego sanguíneo, se recomienda el uso de Plasma Rico en Plaquetas (PRP). La explicación del PRP se encuentra en la entrada número 13 del blog, básicamente consiste en extraer sangre del paciente, separar y concentrar las plaquetas y reinyectarlas en la zona dañada para estimular la regeneración y la formación de nuevos vasos sanguíneos. Los puntos de inyección concretos de este plasma concentrado para obtener la máxima eficiencia en la disfunción sexual femenina se recogen bajo la patente americana de o shot. Este tratamiento requiere una o dos sesiones, sus efectos se aprecian en las primeras semanas tras las inyecciones y se mantienen durante un año aproximadamente, dicha duración depende de las características del paciente. Es indoloro y no tiene efectos adversos conocidos ya que se inyecta la propia sangre del paciente por lo que no hay reacción adversa.
Con este tratamiento se obtiene un aumento considerable de la libido, una lubricación adecuada, se combate el dolor y combate la incontinencia y las infecciones urinarias. Ambos métodos (hormonal y O_shot) pueden usarse en conjunto o de forma independiente según las necesidades de la paciente.